Recientemente me tomé el tiempo necesario de mis
viajes y conferencias para trabajar en mi práctica del
japa (canto con rosario). Aunque he seguido la instrucción
de Srila Prabhupada de cantar un mínimo de dieciséis
rondas del mantra Hare Krishna cada día, sé que
mi japa se había empobrecido y necesitaba cuidado especial.
Traté de doblar la cuota mínima y cantar durante
las primeras horas de la mañana en compañía
de otros devotos, pero lo primero que descubrí fue que
cuanto más cantaba más seco me sentía. Y
no podía controlar mi mente.
Comencé a leer citas de los libros de Srila Prabhupada
que alababan los santos nombres de Krishna. Las afirmaciones de
las Escrituras de que el canto es sencillo y pleno de néctar
me parecían contradictorias con mi propia experiencia.
Pero mientras seguía cantando y leyendo comencé
a comprender que el valor de mis sentimientos sobre mi japa no
era la conclusión en lo que a comprender los santos nombres
se refiere.
Cuanto más leía más me animaba sobre las
glorias del santo nombre. ¿Me equivocaba al pensar que
me beneficiaba del santo nombre aunque no sentía éxtasis
al cantarlo? No. Animarse en ese sentido no es erróneo.
Srila Prabhupada dice que el cambio de corazón que se produce
al cantar se muestra en las actividades diarias. El cita a Srila
Bhaktisiddhanta Sarasvati Thakura, quien afirma que el desprendimiento
de la vida material es en sí mismo un síntoma importante
de los buenos resultados de cantar Hare Krishna. Las lágrimas
y otros síntomas extáticos corporales no los demuestran
ni tan siquiera los devotos más avanzados, y esos síntomas
son fáciles de imitar por los pseudo-devotos (prakrta-sahajiya).
Por consiguiente, Prabhupada menciona los síntomas del
"éxtasis estable" como resultado de un canto
efectivo. Esos síntomas, mencionados en el Néctar
de la devoción, incluyen: ausencia de orgullo, un empleo
del tiempo intenso, indulgencia, atracción hacia el canto,
atracción por vivir en la morada santa de Krishna y siempre
esperar la misericordia de Krishna.
Por lo tanto, no es erróneo pensar que estamos beneficiándonos
mientras cantamos nuestras rondas, aún desde el principio.
Decidí ser desde entonces más optimista y sentirme
agradecido, incluso con el simple beneficio de estar alerta y
despierto, escuchando la correcta pronunciación del mantra,
sentarme en posición erguida y cantar a buen ritmo.
Los devotos de todos y cada uno de los templos de ISKCON hacen
un progreso significativo durante las horas del japa, mientras
continúen esforzándose sinceramente. Y no sólo
en los templos, sino en cualquier lugar donde haya devotos cantando
su japa, esforzándose por pronunciar y oír los santos
nombres, se logran beneficios. Cuando cantamos Hare Krishna, ya
sea en público o en privado, hay beneficio, no sólo
para los que cantan, también para los que escuchan. Entre
los beneficios que recibe la sociedad humana procedentes del canto
del santo nombre Srila Prabhupada menciona la paz, la prosperidad
material, el progreso político y toda clase de buena fortuna.
Aún cuando no nos damos cuenta de las buenas cualidades
que aparecen en el que canta, o en la sociedad, hemos de tener
fe en que los santos nombres son muy poderosos y en que su influencia
mejora la vida de todos.
Para el que canta desaparecen todas las reacciones pecaminosas.
Por eso abandona el sexo promiscuo, el consumo de estupefacientes
y drogas, el comer carne y los juegos de azar. Y aunque no pueda
abandonar todas las secuelas de los malos hábitos se alivia
de su karma pasado.
Grandes beneficios se prodigan para aquel que pronuncia los santos
nombres. Ya sea que me sienta "seco" o "húmedo"
mientras canto, ese canto influye destruyendo los pecados, siempre
que yo no esté cometiendo deliberadamente los pecados pensando
en librarme de ellos gracias al canto. "Si alguien canta
los santos nombres del Señor aún en la condición
más desesperada, o sin desearlo, todas las reacciones de
sus vidas pasadas desaparecen: del mismo modo que cuando un león
ruje todos los animales menores huyen asustados". (Garuda
Purana).
Quiero mejorar. Quiero evitar las ofensas y cantar con atención
y devoción. Pero aunque mi desvergonzada mente se descontrole,
el santo nombre es el soberano. Canto con esa creencia: "Si
una persona inconsciente de la potencia efectiva de cierta medicina
la toma, ésta actuará aunque el paciente lo ignore,
pues su fuerza curativa no depende del conocimiento del paciente.
De manera similar, aunque alguien no aprecie el valor del canto
del santo nombre del Señor, si canto consciente o inconscientemente,
el canto producirá su efecto". (Bhagavatam 6.2.18-19).
Cuando me centré de manera especial en mi canto elevando
la cuota los resultados no fueron espectaculares. Pero en vez
de apurarme por mi incapacidad, me volví a las Escrituras
y comencé a sentir la gratitud por el regalo que Srila
Prabhupada nos ha hecho. Srila Prabhupada escribió: "Hemos
adoptado vidas abominables, como devoradores de carne, borrachos,
perseguidores del otro sexo que llevaban a cabo todo tipo de actividades
pecadoras; sin embargo, ahora hemos recibido la oportunidad de
cantar el mantra Hare Krishna. Por consiguiente, siempre hemos
de saber apreciar esta oportunidad" (Bhagavatam 6.2.34).
Me encontré con que era de gran ayuda recordar la misericordia
personal de Srila Prabhupada que me había salvado de una
carrera suicida. Prabhupada no se atribuía ningún
mérito. Decía que se debía a la misericordia
del santo nombre que él nos entregó siguiendo el
mandato de su maestro espiritual. Sin embargo, yo recibí
ese regalo de mi maestro espiritual. Para tratar de pagarle (guru-daksina)
continuaré cantando y hablando a los demás del canto.
Cuando la gente me pregunta como me siento cuando canto, puede
que admita que me siento seco debido a mis ofensas contra el santo
nombre. Pero también señalaré que la medicina
del santo nombre está haciendo su efecto.
El dedicar tiempo extra tratando de mejorar mi canto me ha convencido de que tengo mucho trabajo que hacer, y que esa es la parte más importante de mi práctica. Como enseñó Sri Caitanya Mahaprabhu, el canto de Hare Krishna es el mejor y el único medio de liberar a todas las almas de Kali-yuga, la degradada era actual. Puesto que este canto es tan importante para el Señor Caitanya y para Srila Prabhupada, ¿cómo me puedo atrever a negligirla? El santo nombre es la persona más benéfica, Krishna, que ansiosamente espera entregarnos todos los beneficios de Su compañía directa. La fe en Dios, la pureza de corazón y, en última instancia, el amor por Dios son los resultados directos de un canto correcto de los santos nombres.
Así que, como dice el Caitanya-caritamrta (Adi-lila
8.28): "Como resultado del canto del maha-mantra Hare Krishna
cada persona hace tal avance en su vida espiritual que, simultáneamente,
su vida material termina y recibe el amor de Dios. El santo nombre
de Krishna es tan poderoso que, aún cuando se cante una
sola vez, se logra con toda facilidad esas riquezas trascendentales".
Todos nosotros hemos oído esas, y otras similarmente inspiradoras,
citas sobre las glorias del santo nombre. Es bueno aceptarlas
como axiomas, sin tener en cuenta nuestros propios límites
en la experiencia espiritual. Pero eso no es bastante. Vale la
pena esforzarse en el canto para que cuando llegue el día
en que no sólo citemos las Escrituras como apoyo, sino
que podamos decir con toda convicción: "Canta Hare
Krishna y tu vida será sublime".