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DOCTRINAS TEMPORALES Prologo
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Comenzaremos con la primera lista de problemas, que
tienen que ver con la doctrina temporal, o sea con el manejo de bienes y dinero
que hace la iglesia.
Porque hemos
llegado a entender, que justamente a causa de los problemas temporales que
nuestro pueblo tiene, la desigualdad y falta de unidad ocasionados por nuestra
desobediencia e iniquidades, es que no se puede avanzar en el terreno
espiritual.
Porque la
redención de Sión depende de que resolvamos primeramente los problemas
temporales y luego los espirituales tal como lo explica el Señor en DyC.
DyC 105
Esta
doctrina de que se debe ordenar primero lo temporal para consolidar o facilitar
lo espiritual no es muy conocida, pero la trataremos luego con más
detenimiento. Sin embargo a efectos de dejar una aclaración rápida y para ir
pensando, diremos que este orden se expresa claramente en el comienzo de la
iglesia cristiana en Jerusalén.
Las
escrituras nos muestran que uno de los primeros "hechos" de los
Apóstoles, antes de proceder al desarrollo de la Iglesia espiritual, fue poner
un fundamento sólido en cuanto a la organización económica y social. Nos
relatan, luego del histórico día de Pentecostés, en el que sucediió la
"Gran Primera Predicación de los Apóstoles" y que resultó en la
conversión de cerca de 3000 almas, como se procedió a poner en orden todos los
asuntos temporales.
Esto
está debidamente testificado y explicado en el principio del libro que
justamente relata los "Hechos de los Apóstoles".
HECHOS 2
44. Y todos los que creían se reunían y tenían
todas las cosas en común.
45 Vendían sus posesiones y bienes, y los
repartían a todos, a cada uno según tenía necesidad.
46 Ellos perseveraban unánimes
en el templo día tras día, y partiendo el pan casa por casa, participaban de la
comida con alegría y con sencillez de corazón,
HECHOS 4
32 La multitud de los que habían creído era de un solo corazón y una sola
alma. Ninguno decía ser suyo propio nada de lo que
poseía, sino que todas las cosas les
eran comunes.
33 Con gran poder los
apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante
gracia había sobre todos ellos.
34 No había, pues, ningún necesitado entre ellos, porque todos los que eran
propietarios de terrenos o casas los vendían, traían el precio de lo vendido
35 y lo
ponían a los pies de los apóstoles. Y era repartido a cada uno según
tenía necesidad.
Nos pasma, en parte oscurece el entendimiento y por otro lado entendemos
que responde a la lógica de esta Tierra, que a esta altura de la historia,
donde hablamos tan fluidamente, y con tal exceso de sobriedad y seguridad de
evolución y progreso, el hecho de tener que dar esta reiteración de
aclaraciones doctrinales sobre algo tan básico y elemental como "poner
en orden el tema de los pobres".
Y
parece imposible y hasta demasiado absurdo, dar explicaciones tan extenuantes
sobre algo que Ya Debería Haber Sido Comprendido y puesto en práctica
desde el tiempo que esta información estuvo a disposición, de un pueblo que se
hace llamar "Cristiano", y que dice pretender en lo más profundo de
su seno, llevar la justicia y la luz a los pueblos de la tierra.
Demasiado fuerte el contraste, entre lo escrito y
lo practicado, como para seguir hablando. Las palabras sobran y los hechos
están a la vista.
Veremos ahora, lo que las Escrituras manifiestan que deberíamos haber hecho
para que Sión estuviera funcionando ya, y comprenderemos por su ausencia, todo
lo que nos falta hacer y cambiar, para que comience su redención.
Los puntos
que estudiaremos a continuación se podrían expresar resumidamente así:
No
debe haber pobres ni necesitados en el rebaño.
Debe haber igualdad
Debe haber unidad
No debe
haber pastores asalariados
La
ley económica y social del evangelio temporal es La Consagración de
bienes y Los bienes en Común,
Nunca hubo,
no hay, ni habrá otro sistema temporal
revelado alternativo para cualquier pueblo que se llame de Dios.
No debe
haber propiedad privada. Jehová es el dueño y el que
administra
No se debe dar limosna, sino lo que pertenece por derecho propio,
se da lo que pertenece a Jehová y según lo necesario.
Obispos deben trabajar en su oficio, no en las
cosas espirituales.
Debe
implementarse la Ley de
mayordomias y heredades.
Los
Diezmos deben ser usados en la manera y para los fines que fue revelado.
Otros
Podremos
observar que todos estos puntos en cuestión, están íntimamente ligados entre
sí, y que fueron diseñados, para trabajar como partes irreemplazables del mismo
sistema; de tal manera que no se puede modificar uno solo de ellos sin
necesariamente, modificar los otros, porque cada uno de estos es causa y
consecuencia del otro.
No obstante
esta condición veremos como de todas maneras el hombre puede producir un
producto "sustituto" del sistema original, reemplazando la estructura
principal y las partes, y ante la vista de todos, mantener está corrupción por
siglos, o simplemente 150 años sin demasiada oposición.
Veremos como
se implementa "la maquina de injusticia", y como todo esto
pasa inadvertido delante de nuestros propios ojos, y astutamente se nos
convierte en sus cómplices y ejecutores.
También podremos entender claramente como el apetito de
esta máquina no solo busca víctimas espirituales, sino y también quita a las
ovejas el poco sustento temporal que éstas tengan, porque de este producido
debe dar de comer a sus feroces ministros, engranajes claves de esta gigantesca
"Bestia Apocalíptica".
Nos pasma, en parte oscurece el entendimiento y por otro lado entendemos
que responde a la lógica de esta Tierra, que a esta altura de la historia,
donde hablamos tan fluidamente, y con tal exceso de sobriedad y seguridad de
evolución y progreso, el hecho de tener que dar esta reiteración de
aclaraciones doctrinales sobre algo tan básico y elemental como "poner en
orden el tema de los pobres".
Y parece
imposible y hasta demasiado absurdo, dar explicaciones tan extenuantes sobre
algo que Debería Haber Sido Comprendido y puesto en práctica desde el tiempo
que esta información estuvo a disposición, de un pueblo que se hace llamar
"Cristiano", y que dice pretender en lo más profundo de su seno,
llevar la justicia y la luz a los pueblos de la tierra.
Demasiado fuerte el contraste, entre lo escrito y lo practicado, como para
seguir hablando. Las palabras sobran y los hechos están a la vista.