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El "Carnavalito" Por: Naja Crotalis La cercanía del Carnaval, de la que muchos no parecen darse cuenta (espero que eso no influya en el éxito del de este año) me obliga por diversas razones a no responder a los, escasos para no presumir, lectores que han pedido que me identifique por no sé que razones inexplicables. Como he tenido mucho trabajo y tengo que ensayar en una comparsa, lo dejaremos para después, si es que siguen insistiendo.Por lo pronto, vamos a lo que nos interesa que son los chismecitos, sin mucha importancia, que se dan en el ambiente social en donde ya hay cierta efervescencia, por no decir ebullición, por el asunto de las fiestas que se avecinan y en particular de las reinas y sus respectivas cortes que son siempre las más criticadas, casi siempre "debajo del agua" porque de frente no pasan del "¡Ay que linda te ves, chulita¡" tan hipócrita. Comenzaremos por la futura soberana del Carnaval, Dalia Franco Romero, que como todos saben ha sido elegida para este cargo muy atinadamente, aunque no ha faltado quien la critique porque "es yucateca" y no sé cuantas cosas más. La niña es linda, ni duda cabe, y como vive en Campeche desde hace mucho, bien puede haber nacido en China, en la Patagonia o en las Islas Caimán, eso no tiene que ver nada. Lo que sí tiene que ver y mucho es el haber encargado su bailable a una conocida maestra de danza (Leslie González Gantús, si no me equivoco nuera de la maestra Ana Rosa) que no sabemos que experiencia pueda tener como coreógrafa de bailes carnavalescos. Sobre todo con una chica que además de medir un poco más de lo normal, no tiene, digamos, la figura de una bailarina de ballet. Esperemos que su numerito no vaya a ser de jazz o tipo Broadway, porque, aún sin saber que experiencia pueda tener Dalia en estos menesteres, esa clase de bailables como que no va con la alegría del Carnaval, sobre todo del nuestro. Porque la verdad no me imagino a Dalia bailando de puntitas haciendo acrobacias con su pareja, sobre todo si ésta no está lo suficientemente robusta para hacerlo. Ya tenemos cierta experiencia en el asunto, si recuerdan que en el 96, en que fueron reyes, la que después fuera "Nuestra Belleza Campeche", Liliana Réndiz Buenfil y el "Pájaro Cardona", cuando éste se empeñó en convertir a su bella pareja en bailarina de jazz y traía a la pobre, contando los pasos y tratando de seguir al galán. La diferencia se notó el día que bailó sola. A menos que Dalia llevara de pareja a su hermano (Mario creo que se llama) que no se le despega ni a sol, ni a sombra (hace bien, con esos "buitres" que hay por allí), aunque lamentablemente el futuro "cuñado" de Campeche pesa unos cuantos kilowatts de más y, la verdad, no creo que sea buen bailarín. En fin, confiemos en que Leslie sabrá ponerle algo adecuado a nuestra soberana de las fiestas carnestolendas. Porque hay que recordar, por mucho que algunos no lo comprendan, que una cosa son los bailables como espectáculo para fiestas de otro género y otra muy distinta, el de las comparsas carnavaleras. Ya lo hemos comprobado con los bailables que presenta la maestra Ana Rosa cada año, que son de aplaudirse, pero que, definitivamente, no van con el espíritu festivo del carnaval de Campeche. Por cierto, uno de los pocos aciertos del comité del Carnaval ha sido la elección del "Toro Lara", como Rey Feo (ahora sí que volvemos a la "tradición" porque ninguno de los anteriores quiso que le pusieran lo de feo) porque la verdad que don Toro, tiene experiencia en el asunto y lo único que pudiera reclamar es que este año ya no va a poder concursar con su grupo "Academia de Panza". Respecto a esto, esperemos que don Toro no cometa el error de volver a vestir de viejas a sus compañeros de comparsa, porque pensamos que tiene el ingenio suficiente como para presentar un buen bailable, sin necesidad de estarnos haciendo aparecer grotescas. Creo, de veras, que la comparsa de don Toro, será la sorpresa de este Carnaval y que lo hará de lo mejor. Pues, como dije en párrafos anteriores, estamos ya en plena época y batallando contra el tiempo para sacar adelante el Carnaval número 13, 500 según las promociones del Comité, reinas, embajadoras, princesas, archiduquesas y demás congéneres reales están sudando la "gota gorda" para hacerlo mejor que las otras y los papás gastando hasta lo que no tienen para que sus hijas luzcan de maravilla. Y más ahora que ya Campeche es un pueblo "civilizado", en el programa, dicen, que figura la coronación de la reina "gay" (travestíes, ya sabe) que será, ni más ni menos que Panchito García, artísticamente conocido como "Francis", así que las mujeres auténticas, de a devis, tendrán que lucirse para no ser opacadas por el grupo de travestidos que, desde hace mucho, se están preparando para el asunto. ¿Qué como lo sé? Pues simple y llanamente porque mi estilista forma parte de ese grupo y cuando he ido a que me retoquen el cabello, veo que están los chavos borda que te borda y costurando hasta a dos manos. En lo personal, no tengo nada contra ellos ya que los que conozco se comportan como buenos amigos, pero me pregunto que pensarán las señoras de la vieja guardia. En fin, que ese es tema de otra página, así que sigamos con el Carnaval con la esperanza de que este año, los colegas de la fuente no tengan problemas con doña Idem, que hasta el momento sigue sin decir ni esta boca es mía, ni con la Flor más Bella o como se llama la Reina de la Televisión ahora, ni con el elenco de artistas que nos deleitarán la pupila en la remozada Concha Acústica. En la que, por cierto, ya no se han levantado "campamentos" como hasta el año pasado, con los vivos que gustan de lucrar con la gente aficionada a los apretujones que nos dan en las coronaciones. Lo siento por mi parte, porque tengo un enamoradito que desde el dos de enero se iba allá con sus cuates a emborracharse casi a diario, pero ganaba sus buenos cobres vendiendo luego los lugares que "cuidaban". Y ya que hablamos del tema, me gustaría sugerirles a los que manejan la televisión local que me inviten a sus comentarios precarnavalescos, ya que también falta la opinión de los jóvenes en ese asunto, y no sólo la de los mayores (por no decirlo más grueso) que son los que tiene a su cargo esa chistosa televisiva. También los chavos tenemos derecho a opinar ¿o no?. Igualmente espero que me llegue alguno de los 400 gafetes que tan indiscriminadamente reparte el Comité para echarle una criticadita a lo que presentan. Porque ya me canse de ir a amontonarme detrás de un muro de gente en la Concha para no ver nada, y si recibir las majaderías (y una que otra sobadita) de los que van a amontonarse allá para malorear a las chavas que queremos ver las coronaciones. Pero como ya me cansé de "viborear" un poco, ahí les dejo mi manera de pensar, para que después me critiquen, me destrocen o me quieran linchar como acostumbra la gente de sociedad cuando alguien tiene el atrevimiento de comentar, no con piropos, las cosas que suceden en nuestro ambiente. Y les hablaremos, seguro, del precarnavalesco... si es que me dejan pasar... sin pagar. |
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