MUERE EL AMOR.
Como una planta del jardín sin riego,
muere el amor que alguna vez sentía,
tú te olvidaste de avivar el fuego
como lo hiciste cuando fuiste mía.
En la rutina de la vida diaria,
predominaron cosas materiales,
sin tregua has usado la temeraria
hiriente artillería de armas verbales.
La oposición ha sido permanente,
intento de imponer definitivo,
sabes que lo percibo claramente,
y de tu voluntad no soy cautivo.
Me hiciste que comiera de tu mano,
y que yo dependiera de tu apoyo,
y en el momento crítico, en vano
dices: ahora salte del escollo.
Pues bien, quiero decirte, y que sepas
Que el amor murió día con día,
ahora Se que en eso no discrepas,
es tu victoria, y también la mía.
Bulmaro Landa Quezada.