Tango : Sentencia gaucho belga SENTENCIA Letra de Celodonio Flores. Música de Pedro Maffia. Compuesto en 1923. La audiencia de pronto se quedo en silencio; de pie, como un roble, con acento claro hablaba el malevo : "Yo nací, señor juez, en el suburbio, suburbio triste de la enorme pena, en el fango social donde una noche asentara su rancho la miseria. De muchacho, nomás, hurgue en el cieno donde van a podrirse las grandezas. Hay que ver, señor juez, como se vive para saber después como se pena ! Un farol en una calle tristemente desolada pone con la luz del foco su motivo de color. El cariño de mi madre, de mi viejita adorada, que por santa merecía, señor juez, ser venerada, en la calle de mi vida fue como luz de farol. Y piense, si aquella noche, cuando oí que aquel malvado escupió sobre sus canas el concepto bajo y cruel, hombre a hombre, sin ventaja, por el despecho cargado, por mi cariño de hijo, por mi cariño sagrado, sin pensar, loco de rabia, como un hombre lo mate. Olvide usted un momento sus deberes y deje hablar la voz de la conciencia. Deme después como hombre y como hijo los años de presidio que usted quiera, y si va a sentenciarme por las leyes aquí estoy para aguantarme la sentencia... pero cuando oiga maldecir a su viejita es fácil, señor juez, que se arrepienta !..." La audiencia, señores, se ahogaba en silencio, llorando el malevo, lloraba su pena el alma del pueblo !