Año 1 Nro. 4 - 17 de Agosto de 2001

e d i t o r i a l

Por una lucha continental unificada de los trabajadores argentinos con la clase obrera y los campesinos de América Latina, para derrotar el imperialismo y a los gobiernos cipayos!
Que De Gennaro, D'Elía y Alderete rompan con la subordinación de las organizaciones obreras a los políticos patronales y convoquen a todas las organizaciones obreras y campesinas del continente a concretarla ya

La lucha de los trabajadores ocupados y desocupados de nuestro país es parte de la lucha de obreros y campesinos que en toda Latinoamérica enfrentan los planes de hambre, represión y entrega del imperialismo aplicados por los gobiernos cipayos de la región. Nuestra lucha es hermana de la de los campesinos paraguayos, de los trabajadores y campesinos bolivianos, de los obreros y los trabajadores sin tierra del Brasil, y también de la lucha de los trabajadores negros y latinoamericanos superexplotados en el corazón mismo del imperialismo yanqui. Es hermana también de la heroica revolución de la clase obrera y el pueblo palestino, vanguardia de la lucha contra el imperialismo en todo el mundo, a la que hoy éste y su gendarme, el estado sionista-fascista de Israel, intentan ahogar en un baño de sangre.
Lo único que impide que nos unamos en una sola lucha a nivel continental contra el enemigo común, y también a la de la vanguardia obrera y juvenil que comienza a enfrentar a sus propias burguesías imperialistas al interior mismo de Estados Unidos, de Francia, de Italia, como viéramos ayer en Seattle y hace pocos días en Génova, son las direcciones de las centrales sindicales de toda América Latina, que nos obligan a pelear separados país por país y llevan nuestra lucha a los pies de algún sector de las patronales nativas, y también las direcciones stalinistas, en primer lugar Fidel Castro y la burocracia restauracionista cubana, que se reúne con Rockefeller y prepara la consumación de la restauración capitalista en la isla.
El "frente democrático" que han montado la CTA y la CCC, al igual que antes el "frente nacional" de Moyano, impiden que los trabajadores argentinos unifiquemos nuestra lucha con nuestros hermanos de clase del continente, porque nos subordinan, uno a los políticos y diputados patronales que como la Lilita Carrió, son amigos y admiradores del imperialismo, y otro a la patronal esclavista del frente productivo, que es su socia menor en la explotación de la clase obrera y el saqueo de la nación.
Desde el palco en el acto de Plaza de Mayo del 16 de agosto, D' Elía, Alderete, De Gennaro, pronunciaron encendidas palabras contra el imperialismo yanqui y el FMI. Si realmente dicen querer luchar contra ellos y enfrentarlos, es hora de que pasen de las palabras a los hechos: ¡rompan ya la subordinación de las organizaciones obreras de ocupados y desocupados a los políticos y diputados patronales y a sus partidos, y convoquen inmediatamente a todas las centrales y organizaciones obreras y campesinas de América Latina, a la CUT de Brasil, al PIT-CNT del Uruguay, a la COB y la Federación campesina de Bolivia, a las centrales paraguayas, peruanas, ecuatorianas, etc., a organizar ya una lucha continental unificada, por sobre las fronteras, contra el imperialismo, los monopolios y los gobiernos cipayos! De lo contrario, demostrarán que sus palabras encendidas no son más que cháchara para engañar a los trabajadores y terminar poniéndolos a los pies de los políticos patronales y los curas. La lucha de los trabajadores ocupados y desocupados de nuestro país es parte de la lucha de obreros y campesinos que en toda Latinoamérica enfrentan los planes de hambre, represión y entrega del imperialismo aplicados por los gobiernos cipayos de la región. Nuestra lucha es hermana de la de los campesinos paraguayos, de los trabajadores y campesinos bolivianos, de los obreros y los trabajadores sin tierra del Brasil, y también de la lucha de los trabajadores negros y latinoamericanos superexplotados en el corazón mismo del imperialismo yanqui. Es hermana también de la heroica revolución de la clase obrera y el pueblo palestino, vanguardia de la lucha contra el imperialismo en todo el mundo, a la que hoy éste y su gendarme, el estado sionista-fascista de Israel, intentan ahogar en un baño de sangre.
Lo único que impide que nos unamos en una sola lucha a nivel continental contra el enemigo común, y también a la de la vanguardia obrera y juvenil que comienza a enfrentar a sus propias burguesías imperialistas al interior mismo de Estados Unidos, de Francia, de Italia, como viéramos ayer en Seattle y hace pocos días en Génova, son las direcciones de las centrales sindicales de toda América Latina, que nos obligan a pelear separados país por país y llevan nuestra lucha a los pies de algún sector de las patronales nativas, y también las direcciones stalinistas, en primer lugar Fidel Castro y la burocracia restauracionista cubana, que se reúne con Rockefeller y prepara la consumación de la restauración capitalista en la isla.
El "frente democrático" que han montado la CTA y la CCC, al igual que antes el "frente nacional" de Moyano, impiden que los trabajadores argentinos unifiquemos nuestra lucha con nuestros hermanos de clase del continente, porque nos subordinan, uno a los políticos y diputados patronales que como la Lilita Carrió, son amigos y admiradores del imperialismo, y otro a la patronal esclavista del frente productivo, que es su socia menor en la explotación de la clase obrera y el saqueo de la nación.
Desde el palco en el acto de Plaza de Mayo del 16 de agosto, D' Elía, Alderete, De Gennaro, pronunciaron encendidas palabras contra el imperialismo yanqui y el FMI. Si realmente dicen querer luchar contra ellos y enfrentarlos, es hora de que pasen de las palabras a los hechos: ¡rompan ya la subordinación de las organizaciones obreras de ocupados y desocupados a los políticos y diputados patronales y a sus partidos, y convoquen inmediatamente a todas las centrales y organizaciones obreras y campesinas de América Latina, a la CUT de Brasil, al PIT-CNT del Uruguay, a la COB y la Federación campesina de Bolivia, a las centrales paraguayas, peruanas, ecuatorianas, etc., a organizar ya una lucha continental unificada, por sobre las fronteras, contra el imperialismo, los monopolios y los gobiernos cipayos! De lo contrario, demostrarán que sus palabras encendidas no son más que cháchara para engañar a los trabajadores y terminar poniéndolos a los pies de los políticos patronales y los curas.



"La liberación de los trabajadores será obra de los trabajadores mismos"

 


"La liberación de los trabajadores será obra de los trabajadores mismos"

 

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