Romeo Y Julieta

Desgraciada ha sido la fortuna que me ha traído consigo el amor,
Pero ¡Oh maravillosa vista! Cupido me hiere nuevamente.
¡Amor a primera vista! Mi pasado amor fue un fugaz resplandor.
No conozco a la persona a quien ven mis ojos y ya la amo;
Y con un beso incontenible sello mi promesa de amor eternamente.
¡Una hermosa Julieta para un Galante Romeo!

Sin saber quién es aquel que me ha besado mi corazón late por él.
Sin poder dejar de pensar en él y desesperadamente volverlo a ver.
Aparece ante mí...confiesa, jura y dice que su amor eterno ha de ser.
Ni por un segundo dudarlo puesto que yo también ya lo amo a él;
Entonces dice su nombre y con fatalidad veo que no debo amarlo...
Pues no importa lo que pase lo amaré pues no puedo olvidarlo.
¡Una apasionada Julieta para un enamorado Romeo!

Yo soy tuyo y tú eres mía mi eterna amada, tu destino es con otro.
No renunciaré a ti, iré en contra del destino y nos casaremos enseguida.
Unidos en matrimonio estaremos siempre juntos, pero no en cuerpo;
Maté a tu pariente y desterrado estoy, he de huir con la luz del día.
Volveré a verte, te escribiré cada día, seca tus lágrimas amada mía.
¡Una fiel Julieta para un asesino Romeo!

No he de casarme con otro, seré fiel a mi esposo hasta el fin.
Primero me quitaría la vida que pensar en faltar a mi amor y juramento;
La única salida será fingir mi muerte, ese es el escape a mi tormento.
Mi amado llegará a tiempo y juntos nos iremos, lejos y libres alfin.
Tomo la pócima, mis ojos se cierran sumergiéndome en profundo sueño.
¡Una temeraria Julieta para un desterrado Romeo!

Mi amada ha muerto y con ella todos mis sueños y esperanzas;
Y mi único consuelo será ir a verla al sepulcro antes de tomar el veneno.
Ya maté a tu fatal prometido y sello mi amor con un último beso;
Puse en mis labios el mortal veneno para reunirme a ti en amor eterno.
¡Una desfallecida Julieta para un suicida Romeo!

Despierto de mi profundo sueño y con horror veo a mi amado muerto;
La tristeza me agobia y quiero pensar que nada de esto es cierto.
El destino nos separa de manera cruel pero no por mucho tiempo,
Adiós a este injusto mundo, me reuniré con él en esta o la otra vida.
Empuño la daga y corto en pedazos el cisma, me despido malherida
Y con mi último suspiro libero mi alma con un moribundo beso.
¡Una muerta Julieta para un difunto Romeo!