Canciones inéditas

Noches de Mayo,
sobre las rocas rosas,
dos miradas al mar se delatan.
Una es de oro,
la otra de fina plata,
en el aire, sol y nieve atadas.
Buscaré en la mar
tiempos que jamás
perecieron.
Pasan la noche
con aires de morada,
si en sus horas las olas pies mojan.
Bastan dos de mis palabras,
sueños, fuiste realidad.
Pensad en los anteriores,
días de felicidad.
Comprederéis que lo mejor
es vivir las Noches de Mayo hoy.
Noches de Mayo,
sobre las rocas rosas,
dos miradas al mar se delatan.

Ríos de odio bajaban
por cauces estrechos,
flores de vida salvaje
viven en silencio,
sendos caminos de piedra
besan el suelo.
¿Qué más se puede pedir
por cuidar este cielo
que no es nuestro
y estamos quemando
con nuestros fuegos?
Tiramos escombros cual puerco
escupe a su dueño.
Luna de plata caliente
mantén en tu pecho
una esperanza que siembre
de paz este pueblo triste,
asolado por guerras
y enfrentamientos.
Si un tiempo, uno y bravío,
ahora triste, triste, yerto,
haz que una luz ilumine
nuestros desiertos.
Broten de rabia sonidos,
que al vibrar
sienta miedo y espanto
quien mata.

Página El Bosque