La danza de los hombres sin cabeza

Yo canto al tiempo que fue
la maldición para los hombres
caballerosos y llenos de bondad.
Y pienso en tiu cuando oigo
sonar los gritos salvajes
que anuncian al viento,
las malas lenguas del amor,
dime, ¿qué fue entre tú y yo?
No quiero que mires el reloj
que advierte peligros en la
lajanía de otros mundos muy
lejanos a los dos.
Y mientras canto esta canción
pensarás en otro que no
soy yo.
Mas no me importa si lo
nuestro fue mejor.

Mi padre me buscó un trabajo
"pa" que pudiera mantener esta
familia, que es la mía y
le dije así:
"No necesito de tus flacos
favores, pues para mantenerme
en pie, ya tengo un par de
buenos bastones". Y, ¿quién eres tú
"pa" decirme lo que yo he de hacer?
Me fui a la calle en busca de solución,
mostrando el mejor talento que Dios
me ha dado para vivir. Y esto fue
lo que me dijo el primer hermano
que por allí se me acercó. ¿Por qué
no vas a apuntarte al paro?
Y, ¿quién eres tú "pa" decirme lo
que yo he de hacer?
Voví a mi casa con la guitarra rota y con
un nudo en el corazón que me
impedía alzar el rostro. No hallé
palabras para contar aquello, de
como aquel gran caballero me
propinó semejante ostión.
¡Ay, que dolor! Y,¿quién eres tú
"pa" decirme lo que yo he de hacer.
Soy tu padre.

1936, un año gris que aún se ve.
La elección tuvo que ser
o morir o correr.
La versión de la verdad,¿dónde está?
no se ve; cada uno lo verá
como lo quiera entender (run, run).
No sé muy bien lo que es amar,
pero se ve que nadie amó.
¿Cómo se puede disparar contra
un hermano, contra tu misma
sangre?
Toma tu arma y dispárame.
Estaré en medio de la guerra.
Ya no habrá una segunda oportunidad.

Cada vez que veo un cuchillo afilado
me emociono como un niño.
Cada vez que siento unos puños
en mi pecho me emociono
como un niño.
Cada vez que veo sangre de
mi sangre me emociono
como un niño.
No es que sea una bala perdida.
Piso rosas, me como el mundo.
Yo mato las penas,
lo hago todo por las buenas.
Reviento cosas, soy el malo,
no soy vago, lo hago en nombre
de mi estado.
No es que sea una bala perdida.

Me vendes una pena,
te compro una flor.
Mejor no compro nada
y así no oigo tu voz.
¿Por que me cuesta admitir
que puedas saber quién soy?
Me entretengo pensando
en el color del mar.
Y no se cómo saben
los besos que tú das.
¿Por qué me cuesta admitir
que no los voy a probar?
Invento mil escusas
a la hora de explicar
a quién, a quién van dirigidas
las cartas que en soledad.
Te escribo a ti,
te escribo a ti.
Mi pluma se gasta ya.
Me sobran las ideas,
peor me falta valor.
Escribo mis poemas
a un ser que nunca existió.
Y es que prefiero cantar
a llorar en un sofá.
¿Por qué me encanta pensar
que algún día las leerás?
Yo escribiré, escribiré
tu nombre en un corazón,
hasta que encuentre solución
y alguien me logre entender.

Anoche soñé,
bendita ilusión,
que todo mi monte
el fuego arrasó.
Su cuerpo cenizas,
la ceniza polvo,
y el polvo la nube
que cubre mis ojos.
La cruda luz,
esa visión,
me hizo pensar,
me estremecí.
No conocí
nunca el sabor
de lo que es vivir
bajo un techo los dos.
Si el poder es la fuerza
y la suerte es costumbre,
la costumbre es la fuerza
que enciende mi lumbre.
Si el tiempo es paciente
y el amor es paciencia,
ha de llegar el día
en que todo yo tenga.
Su corazón,
la tranquilidad,
la comodidad,
la comprensión,
la mutua comunicación,
y lo que es vivir
bajo un techo los dos.
Y si el tiempo es paciente
y el amor es paciencia,
ha de llegar el día
en que todo yo tenga.
Su corazón,
la tranquilidad,
la comodidad,
la comprensión,
y la mutua comunicación.

Bajo un techo los dos.

Si el tiempo es paciente
y el amor es paciencia,
ha de llegar el día
en que todo yo tenga.
Su corazón,
la tranquilidad,
la comodidad,
la comprensión,
la mutua comunicación,
y lo que es vivir
bajo un techo los dos.

La semilla

- Estribillo -
Marchó, vivía en soledad.
Ella fue la semilla.
Marchó, vivía en soledad.
Era ella, la quería.

Una simple nota sobre la mesa
dejó: "he llegado tarde,
no me llames, por favor".

Vela por sus días una madre
en un rincón.
Reza en la mesilla una joven
que sembró.
Nunca un barco errante en
su puerto naufragó.
Pronto siempre es tarde para
tomar el timón.

- Estribillo -

Volamos juntos sin manos,
tuvimos una ilusión,
cortamos en mil pedazos
dos años de gran pasión.
Fuimos fonemas afónicos,
oleadas de calor,
agua de Abril sobre Mayo
de furia mi voz.
Déjame decir que no entiendo
porque te amo.
No sé si habrá en tu mundo
tamto daño.
Pues tú me diste amor y odio,
¿cómo quieres que te olvide?
Te di yo toda mi sangre
¿y ahora quieres que resucite?
Oh, no.
Comprarme como un beso
fue lo más sucio de todo.
No hay oro en la tierra
para callae lo que yo pienso.

Lo que yo pienso

Llegue a la granja de los O'Neill,
que está en el monte Keaton.
Me recibieron con un café
y un pastel de whisky.
Su hija Susan me preguntó
que hacia dónde marchaba.
Y sin pensar le contesté:
¡no sé dónde voy!

La luz endeble del candil
creó un ambiente lúgubre, cuando el menor
de los O'Neill sacó su viejo whistle.
Y comenzó a entonar bellas melodías,
que recordaban la tradición.

- Estribillo -
Muéstrame el camino
hacia la cumbre.
Dime dónde está la salvación.
Ve a donde el corazón te mande,
y ójala que el viento esté
a tu favor.

Pasaron varios meses hasta que el
frío invierno cubrió los verdes
prados con su fina capa blanca.
Entonces fue cuando la luz llegó a
mi cabeza, y vi la vida de
otro color: verde y naranja.
Desde un recodo del camino
divisé un refugio, me acerqué
con gran cautela y llamé a la
puerta.
Y cual sería mi sorpresa cuando
descubrñi que los O'Neill estaban
allí tocando esta canción.

Soy un ser, soy un ángel,
soy un libro en un cajón,
soy un tren sin retorno,
soy un barco en la estación.
Soy la luz, soy la sangre,
soy la esencia de tu voz,
soy la sed, soy el hambre,
soy la cena del dolor.

- Estribillo -
Y si el mundo manipula
tu propio corazón,
corta el hilo y permite
que el muñeco caiga en dos.

Soy la ley, soy el orden,
la justicia del traidor,
la ilusión del que busca,
del que mata por pasión.
Soy la bala que te espera
en el tren del cargador.
No soy quien, no soy nadie.
Yo no existo, yo no soy.

- Estribillo -

Cante quien cante ando distante,
sea una mujer o un hombre semejante.
Cante quien cante le odio bastante,llevo corbata,
visto elegante.
Cante quien cante no se me espante, mi profesión
es representante.
Cante quien cante ando distante,
sea una mujer o un hombre semejante.
Vendo canciones, vendo acordes,
vendo señales, vendo bemoles,
vendo colores, vendo dolores, vendo señores,
vendo postales.
Yo vendo un producto revolucionario.
Voy a hacerte de oro,
yo soy empresario.
Cante quien cante no se me espante, mi profesión
es representante.

Cante quien cante voy a dar el cante,
tengo en mis manos algo excitante.
(BIS)

Pero mi porcentaje no me hace montante.
Voy a poner una cifra delante.
Cante quien cante no se me espante, mi profesión
es representante.

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