Ganaremos
Ganaremos con palabras la batalla
e impondremos las armas de la razón.
A caballo de estas miradas locas
nos encabritaremos con la victoria;
tu eres el ganador del combate,
yo soy el ganador del combate,
dejémoslo en tablas. Durmamos.
Y mañana seguiremos con tinta y letras
hiriéndonos lentamente, y con grave tono,
hasta que tu o yo perdamos la guerra,
hasta que tu y yo ganemos la paz.
David
(28
de julio de 1997)
PIDO SILENCIO
Pido silencio, tengo derecho a pedirlo.
Y no me haceis caso,
porque no os dais cuenta de que os hablo,
porque nunca os habeis dado cuenta
de que os pedíamos aire
y habeis ahogado cualquier momento de libertad.
Habeis sido siempre intolerantes con
todo
y con todas las voces
que se levantaban a vuestro alrededor.
Habeis vivido mucho tiempo solos,
sólo vosotros, porque teníais bajo los pies
las voces de quienes querian vivir, pero morían.
Habeis machacado a mujeres, hombres,
niños,
nos habeis machacado a todos,
simplemente porque nos amábamos,
sólo porque no entrábamos en vuestra ley.
Pero yo os digo que el peso de la historia
os hará caer en cualquier momento.
Y se que ahora tampoco me escuchais,
tan cerrado teneis el corazón.
De todas formas, todavía os pido
silencio,
porque tengo todo el derecho a hacerlo.
David
(julio
'97)
Dedicado
a Aristipo y a todos los que como él están pagando con su
libertad la
intolerancia y la sordera de los intransigentes.
NUESTROS LABIOS
Subiremos lenta y pesadamente
esta cuesta del deseo
para ver si podemos llegar y socorrer
el tiempo de claridad sostenido
de estos ojos y labios nuestros.
Dejaremos de una vez las cadenas
porque ya no somos prisioneros
y olvidaremos también las sombras
que nos han cegado durante un tiempo
y ahora nos envilecen y aplastan.
Nos libraremos de ideas viejas
si somos capaces de mantener el deseo
y el sueño del sol y de dejar la era
de la ignoráncia perpetua del crimen
y perder para siempre el estigma.
Patinaremos sobre el océano de
oscuridad
y recobraremos el color y el tiempo
y no tendremos que escondernos como antes
porque la noche dejará paso al dia,
como tus labios abrillantan mi deseo.
David
(julio
'97)
AMOR
En un sobre cerrado con besos
y lacrado con rojo de amor
te escribiré mis amargos lloros
y te cantaré canciones melancólicas
para que vuelvas pronto.
¿No oyes mis lágrimas gemir,
caer por mi rostro a raudales?
Es el precio del añoro
que baja a dar mal gusto
a mis helados labios.
Bailaré mil y una veces, solo,
por esta pista de tu recuerdo,
hasta que mi cuerpo caiga a tierra
y entonces palpitará mi corazón
y el polvo, todavía, me contará cosas tuyas.
Cautivo del añoro de tus ojos,
escruto tu retrato enrojecido por el tiempo
y me hacen de espejo los cristales,
para tener dos cuerpos en un sueño,
la imagen de aquel a quien deseo.
¡Que lento pasa el tiempo
en esta habitación oscura
en la que me asalta el delirio de amor
y la sangre del silencio me ahoga
con espeso y mortal equilibrio.
David (julio '97)
¿RECUERDAS?
¿Recuerdas, mi amor, aquella noche de
Fiesta
llena de julio y bailes y ruido y besos?
¿Recuerdas el pozo de agua, el cemento, la farola
y aquel primer abrazo breve y miedoso?
Todo aquello fué porque éramos
inocentes,
como esta mañana en que contemplé, inmóvil,
la soledad fría del lecho.
Yo, amor mio, lo recuerdo todo. Todavía.
David (julio '97)