Suelen ser tus mejores
horas..., lo se porque te conozco.
Un atajo a la reconfortante
calidez del amanecer
es la distancia de
los minutos oscuros.
Y yo se que son tus
mejores horas. Lo se porque te conozco.
Si es el mismo viejo
miedo, ese compañero de caminos, el que tambalea
atalayas con espuma
de ayeres infantiles, descontroladamente infantiles.
Es que nunca se termina
?.
Amarga vid,
recuerdo de aquellos masticares.
La deriva de la noche
es el camino de los locos.
No hay placeres en
los ojos abiertos por la tensa lucidez de la vigilia.
Si ni siquiera nos
toca la locura eterna, esa bendita excusa de los fugitivos que
permite soportar para
siempre los embates tempestuosos de la memoria.
No te sientes a mi
mesa !!!
Viejo duende, me has
derrotado una vez mas.
Hijo terreno soy por
esta noche.
Mi brebaje esta frío.
Mi princesa duerme en su tesoro. Solo.
Como controlarte?,...si
son tus mejores horas.
Alcanzo a pronunciar
una pregunta...
Hay alguién
ahí?
.....Alguien?
Pemedina
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