GRUPOS DE ENCUENTROS
IGLESIA EVANGELICA BAUTISTA DEL CENTRO. REG. CULTO N:672. RODRIGUEZ 542. ROSARIO
EDIFICANDOOS LOS UNOS A LOS OTROS
VOLVAMOS A LO BASICO
LECCION NUMERO TREINTA Y NUEVE.
ANIMAOS LOS UNOS A LOS OTROS
Introducción
Estábamos analizando en nuestros encuentros, el ejemplo de los cristianos de Tesalónica en cuanto al ánimo mutuo. Estos cristianos antiguos estaban confundidos en cuanto a algunos detalles del futuro, por eso Pablo les da a conocer detalles que han de alentarlos en el camino de la fe. En primer lugar, les aclara la verdad con respecto a los que "duermen en el Señor". Luego respecto al arrebatamiento de la iglesia. Hoy seguiremos con la verdad respecto al Día del Señor. Los creyentes de Tesalónica eran muy vulnerables en el área de la escatología (doctrina de las últimas cosas). Satán hizo de esta doctrina un punto de ataque crucial en sus vidas. Después de haber escrito Pablo la primera carta, asegurándoles acerca de los muertos y el arrebatamiento de la iglesia con lo que serían librados de la ira de Dios, un falso maestro los desbarató, enseñándoles que el "día del Señor" ya había llegado (2 Tesalonicenses 2:2). Pablo inmediatamente, escribió una segunda carta, reasegurándoles que el día del Señor no había venido. Les recordó la experiencia de su conversión, que Dios los había "escogido desde el principio para la salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad, a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo, esto es, en su venida" 2:12-14.
Pablo terminó esa exposición de la perspectiva de Dios sobre este asunto con el tono familiar de su epístola a los tesalonicenses: "Así que hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra. Y el mismo Jesucristo Señor nuestro y Dios nuestro Padre, el cual nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia, conforte vuestros corazones y os confirme en toda buena palabra y obra" 2:15-17.
Aquí vemos otra vez a Pablo usando la verdad de Dios para animar a los tesalonicenses. Es interesante que se refiera a la "consolación eterna". Esto, naturalmente, es lo que hace la Palabra de Dios tan poderosa, tan significativa, tan confortable. No estamos compartiendo conceptos temporales filosóficos o ideas que están limitadas en el espacio y en el tiempo. Mas bien, Jesús dice: "Los cielos y la tierra pasarán, mas mis palabras no pasarán" (Mt 24:35).
Por eso la Palabra de Dios debe ser el medio primario que los cristianos
deben usar para "animarse unos a otros" y "edificarse unos a otros".
Pasos prácticos para ayudar a los cristianos a alentarse unos a otros.
Paso 1.
Todos los cristianos deben comprender lo importante que es la Palabra de Dios para edificarnos unos a otros en el Cuerpo de Cristo. Y todos los cristianos debemos ser desafiados a aprender lo que dice la Palabra de Dios. El cristiano debe estar dispuesto a compartir la Palabra con otros, que están en necesidad especial de aliento. En otras palabras, los cristianos no pueden animarse mutuamente con las Escrituras a menos que estén familiarizados con las Escrituras.
Momento de diálogo: hacer grupitos de dos o de tres donde cada integrante de testimonio acerca de algún versículo que aprendió de memoria últimamente, o algún capítulo significativo o trascendente en su experiencia de las últimas semanas. Luego contar entre todos experiencias donde han alentado a otros en situaciones significativas o que hayan recibido aliento de otros hermanos. Dar lugar a los integrantes del grupo a hacer promesas de dedicar más tiempo al estudio de la Palabra de Dios, recordando que la carrera cristiana es una carrera de largo alcance y no una de 100 metros. Decidamos hoy mismo no tocar más de oído y cambiar nuestro acercamiento a la eterna Palabra de Dios.
La Palabra de Dios, no sólo ayuda a nuestro crecimiento personal, sino que con
nuestro crecimiento podemos ayudar a otros en su propio crecimiento.
Hasta el próximo encuentro.