GRUPOS DE ENCUENTRO

IGLESIA EVANGELICA BAUTISTA DEL CENTRO. REG. CULTO No 672. RODRIGUEZ 542. ROSARIO

Aurora de una nueva vida- La paz interior

 

LECCIÓN NÚMERO TREINTA Y OCHO

 

Soledad propia y soledad ajena - 3

 

 

Introducción: el material que estamos utilizando, es de gran ayuda para todos los que necesitan paz interior. Los apuntes del presente ciclo, se refieren al tema de la soledad, propia y ajena, a la luz de la Palabra de Dios. Cada apunte ha sido elegido y traducido cuidadosamente, siguiendo un proceso de adaptación y actualización. Proponemos conservar este material, porque es de valor permanente. Asista a un núcleo en crecimiento.

 

1.      Nuestro Señor te está buscando

Ver Lucas 15:1-7

 

En la historia de la oveja perdida, que relató Jesús, no fue la oveja la que encontró al pastor, sino el pastor el que encontró a la oveja. El Señor nunca dijo: “Yo he venido para que las ovejas perdidas puedan encontrarme” sino: “el Hijo del Hombre vino a buscar y salvar lo que se había perdido”. Los religiosos de Laodicea no fueron invitados a llamar a las puertas el cielo, sino a entender que el Dios del cielo estaba llamando a las puertas de sus corazones, y que ellos eran los que debían abrir (ver Apocalipsis 3:20). Llegamos a ser verdaderos cristianos no porque nosotros seamos perseverantes en buscar a Dios, sino porque Dios es muy paciente en buscarnos a nosotros. 

 

¿Estás sintiendo el llamado de Dios a la puerta de tu corazón?

 

2.  Quizá tienes a tu lado un Amigo que no reconoces

Ver Lucas 24:13-16

 

Nuestro Señor a veces aparecía o viajaba “de incógnito”. Por ejemplo, en la mañana del Domingo de su Resurrección se acercó a María Magdalena para reconfortarla y le habló sin que ella lo identificase, hasta que El se dio a conocer. Aquel mismo día, por la tarde, anduvo junto a dos de sus seguidores, por el camino a la aldea de Emaús, que conversaban tristemente entre ellos, sin advertir que el propio Jesús estaba a su lado. ¿Cuántas veces has olvidado que Jesús siempre te acompaña y que nunca estás en soledad, si de veras has confiado en El? ¿Le reconoces como el compañero fiel en el camino de la vida o eres ciego a esa realidad?...

 

En el viaje de la vida puedes tener a un gran acompañante: Jesús.

 

3. En la dimensión humana, el precio del liderazgo puede ser la soledad

Ver Hechos 3:14-15

 

No te quejes. La humanidad debe muchos de sus progresos a las personas intrépidas que pese a la incomprensión y la oposición de muchos, tomaron la iniciativa rumbo a nuevos avances. Los pioneros casi siempre son impopulares. Tanto mayor sea su visión, tanto mayor será el antagonismo de las mayorías que no los entienden. Jesús, el pionero de la Vida, fue rechazado y crucificado por la gente que El quiso salvar. Por eso, aunque te sientas solo e incomprendido en tu liderazgo cristiano, El te comprende y te acompaña. En ese camino están sus huellas. ¿Estás dispuesto a pagar algún tipo de precio por guiar a otros?

 

Jesús te comprende y te acompaña, ¿lo crees o dudas?

Acércate a Jesús y recibirás misericordia, gracia y oportuno socorro

 

4.      Los grandes cristianos no eran arrastrados por cualquier viento de doctrina

Ver Efesios 4:14 y Mateo 7:13-14

 

Los “niños fluctuantes” hacen “peregrinaciones” para buscar a supuestos maestros, y seguir el rumbo de las multitudes. Pero el Señor Jesús dijo que “estrecha es la puerta y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan”. Grandes multitudes se entusiasman con cualquier viento de doctrina, porque “ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella”. Evitemos la confusión. Seguir a Jesús no es un simple “sentirse bien”. ¡Es una vida de sacrificio, de renunciamiento, de fidelidad a la sana doctrina, de obediencia a la Palabra, de llevar su cruz, de ganar a otros para El! El profeta decía: “¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo! (Isaías 5:20).

La vida cristiana no es un “happening espiritual”; no es una vida cómoda; sino una vida de amor y esforzado servicio, en compañía de los que no se engañan con las apariencias. ¿Te arrastrará este tipo de “viento”?......

 

Hasta el próximo encuentro

 

Índice - Página princcipal

1