- ¡ Oh Jesús ! corona y premio inefable de aquellos que se han
distinguido con humilde y heroica fidelidad, en la imitación de tus virtudesy, en modo
particular, en la generosa participación a tus sufrimientos, para ser apóstoles valiosos
e infatigables en la salvación de las almas; con firme confianza yo te suplico que
glorifiques también sobre esta tierra, a tu siervo Padre Pio de Pietrelcina,
concediéndome por su intercesión, la gracia que ardientemente deseo de todo corazón
que: ................
Doy gracias Dios por que me has escuchado y te pido que se haga Tu
Voluntad y no la mia.
Así sea por siempre
Amén
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