Todas las plantas, incluso
la más insignificante, siempre resulta de mucho beneficio
para el medio ambiente. Se dice -según estudios- que si
cada habitante de la Cd. de México tuviese un área
de al menos 2m. cuadrados y tuviese algún árbol
o planta en ella, la contaminación bajaría, no del
todo pero sí notablemente.
Pero muchos de nosotros no tenemos la capacidad de tener patios hermosos y bien cuidados, pero sí podemos permitirnos el lujo de tener pequeños cultivos, ya sea en terrazas, patios y balcones. ¿Cuántas veces no hemos visto una casa con plantas trepadoras, muchas macetas, o un pequeño jardín? y sin embargo decimos "que bien se ve"... más que la casa, es nuestro sentimiento por lo natural, por el color verde. Lo mejor de todo es que los esfuerzos para lograr un pequeño lujo de estos es mínimo, en la mayoría de los casos sólo se necesita un poco de agua y tiempo de cuidado.
Pero si Ud. piensa que no existen ventajas en el hecho de cultivar plantas en casa, lea bien lo siguiente:
Las plantas trepadoras (aquellas que cubren las fachadas) refrescan el interior de las casas al atrapar la luz del sol en su follaje. Las plantas trepadoras no necesariamente necesitan una gran área de sembrado, algunas variedades incluso se dan perfectamente en macetas de buen tamaño. Las plantas trepadoras son de rápido crecimiento (como la madreselva, la parra y la bugambilia) o de mediano desarrollo (como los rosales trepadores y la parra de uva, las cuales hacen uso de poca agua). Incluso, la mayoría de las plantas trepadoras no necesitan de excesivos cuidados; agua y una ligera poda son más que suficientes. Las plantas no trepadoras, o de pasillo, de sombra, etc. son también vitales, pues generan una enorme cantidad de aire puro y mantienen la temperatura ambiente a niveles estables y agradables.
Si tiene Ud. la oportunidad
de hacer uso de un jardín, lo más recomendable es
que intente cultivos biológicos, es decir, evitar todo
tipo de insecticidas y herbicidas. Las combinaciones de plantas
muchas veces permite que se protejan unas a otras, por ejemplo,
las zanahorias y las cebollas, o las rosas y la lavanda... La
lógica es simple: cada planta tiene sus enemigos naturales,
pero la otra planta los ahuyenta y a su vez recibe los mismos
beneficios. Si lo que desea es dividir un área natural,
un jardín o un parque, una de las mejores opciones a las
que se pueden recurrir es evitar los muros y paredes y substitirlos
por setos. Vuélvase verde, sí, que no le importe
que los demás no lo hagan, sea Ud. parte de los que hoy
se preocupan por el mañana. Plante árboles, ayude
en estas campañas. Las personas, y en especial la naturaleza
se lo agradecerán.