"El Deshollinador". Nombre extraño, ¿no? Este referencía a aquel oficio antigüo de quien limpiaba las chimeneas (¿cuántos de nosotros no necesitamos una limpiadita de chimenea?).

Deshollinar: quitar el hollín. ¿Hollín...? Diminuto polvo de carbón, residuo causado por la combustión, o lo que es lo mismo, figurándolo y distorsionándolo un poco, porqué no, asentamientos de un proceso. Y a veces, pensar, que es un proceso, deja residuos, y las letras son uno de ellos. Entonces: ¿esta página debería llamarse El Hollinador…?

Cierto o falso, esta página es un corto tributo a las ideas, y sobre todo, a las de Ciencia Ficción.

El concepto Ciencia Ficción habla sobre una ciencia ficticia, aquella que, charlatanamente, detalla a la mentira como a una verdad... ¡y todavía la pretende elevar al grado de ciencia, darle su credibilidad! Y éso es todo un reto: inventar lo irreal, y brindar la apariencia de pura y corriente realidad. El lector --ó el mirón de películas y series-- deja penetrar la mentira por sus sentidos; primero resiste incrédulo y burlón, después se debilita ante la elocuencia de la farísea historia y termina sucumbiendo, dejándose envolver por las ideas que entelarañan su cerebro cautivo.

¿...Que quién es El Deshollinador? Sólo las letras y quienes me contactan lo saben…

"No sólo la Ciencia Ficción es mi aliento". También sus enajenadas cónyuges, la Fantasía y el Horror (¿o prefieres llamarlo "Terror"?).

Si te sientes identificado con esta página, comunícate; si no, tambien, para mejorarla con tus ideas. Esta página de ninguna manera pretende ser el reflejo de una persona, sino englobar la expresión de todos los que nos deleitamos con el arte de la CF.

22 de mayo de 1998