Paralelo al nuestro, existió un pequeño "Universo de bolsillo", donde existieron un Krypton y una Tierra. Como en nuestro Universo (por "nuestro" me refieró al Universo DC), Krypton explotó y Jor-El envió a su hijo a la Tierra. Pero los poderes de este Kal-El se desarrollaron más rápidamente y al llegar a la adolescencia asumió su rol como ¡SUPERBOY!.
Pero una vida heróica iniciada a tan temprana edad cobra sus deudas rápido, y Superboy muere durante una misión con la Legión de Superhéroes del siglo XXX (¡Hey! Este chico si podía viajar en el tiempo, lo que no puede hacer nuestro Superman), dejando a la Tierra desprotejida contra una amenaza venida del desaparecido Krypton.
Mucho hace, las leyes de Krypton (que vivió una era de crecimiento sin guerras) prohibían la ejecución de los suyos, por crueles que fueran sus crimenes. Para castigarlos, Jor-El inventó lo que llamó "La Zona Fantasma", donde los villanos permanecían por los siglos de los siglos vagando, cual fantasmas en un Universo de nada. Pero tres de estos criminales escaparon y llegaron a la Tierra. Desesperado, Lex Luthor (no un criminal en esta Tierra), creó una forma de vida artificial con la capacidad de adoptar cualquier forma, la llamó Matrix y la envió a nuestra Tierra a buscar a nuestro Superman. Esta forma de vida adoptó la imagen de una bella rubia y un nuevo nombre, el de ¡SUPERCHICA!
Superchica regresó a su "Universo de bolsillo" con Superman, pero para entonces, los tres villanos habían acabado con toda la vida del planeta y lo habían dejado completamente estéril. Temiendo por los demás planetas de este Universo y por el suyo propio, Superman tomó la decisión más difícil de su vida y ejecutó a los criminales con una radiación masiva del único elemento sobre la Tierra capaz de matar a un kryptoniano: ¡Kryptonita!
Luego de eso, cargando en su conciencia con lo que hizo y prometiendo nunca tomar de nuevo la vida de un ser vivo, Superman y Superchica regresaron a casa, una nueva casa para ella.